Descripción
Munio y su hermano pequeño Milek viven en un tranquilo pueblo de Polonia donde nunca parece suceder nada interesante. Uno de sus vecinos es un pobre hombre llamado Antón, tan buenazo que no quiere comer carne por no dañar a ningún animal, y que nunca mataría ni a una mosca.
El resto de los habitantes del pueblo se burlan siempre de Antón, pero la madre de los niños es muy amable con él y muchas veces envía a sus hijos a que lleven un poco de sopa o de ropa a aquel «loco»a quien nadie respeta.