Descripción
Más del 90% de las madres novatas tienen pensamientos aterradores sobre sus bebés y sobre ellas mismas. «¿Y si se me cae?». «¿Y si le rompo algo o le hago daño?». El cuidado maternal no es fácil, y surgen reflexiones del tipo «No sé si querré volver a pasar por esto. ¡Dios mío, ¿cómo puedo pensar eso?». Para demasiadas madres, estos son pensamientos secretos, ocultos en algún lugar reservado a la vergüenza, que rápidamente puede convertirse en ansiedad, depresión posparto e incluso autolesión. Pero traemos buenas noticias: ¡PUEDES sentirte mejor!